Salida: 09:30
Llegada: 19:00
Acumulado: 2607Km
Record de kilómetros por San Antonio. Y es que Padua quedaba lejos. Menuda etapa infinita. El día se ha hecho más largo que la infancia de Heidi.
Se nota que ayer Adolfo guardó las piernas que hoy el tipo iba como un tigre. Bueno, no solo por eso. También están las I + D + I claro.
Salimos disparados. Ese solete mañanero que nos despertó nos llenó de bríos. Daban ganas de pedalear.
Y de rodar...
Ahora algo de I + D + I a la gallega. Este tubular delantero va como un tiro. Lo que hace una mejora técnica macho.
Ahora entiendo la pasta que se meten las escuderías de Fórmula 1 en sus avances tecnológicos cada temporada. Por aquí cerca, en Manarello, los tipos de Ferrari se estrujan la cabeza y la pasta en investigaciones para que sus coches vayan más rápidos. Que si el alerón delantero un poco más bajo, que si las ruedas con no se qué gomas, que si el volante tiene no se qué botones para activar el DRS… paparruchas. Ya veis como le va a Fernando Alonso. Pon un tubular francés en tu vida y notarás lo que es el vértigo.
Alta tecnología, lo que yo os diga... |
Atrás quedó aquel tubular antiguo de hierro pesado. Estos es vida chavales…
Adolfo cree que es por sus piernas, pero yo os aseguro que quién va como una centella soy yo. El tío siempre se me apunta los tantos porque es un acomplejado. Tiene más morro que una lata de callos caducada.
Esa rueda delantera, con goma nueva, tubular de aluminio, radios de carbono y cámara antipincahazos es increíble. La bici va sola chico.
Bueno, no me voy a adular tanto, que los mosquitos mueren entre aplausos.
Lo cierto es que nos hemos puesto a hacer kilómetros y entre pitos y flautas nos hemos puesto en Padua. Realmente aquí la conocen como Padova, la ciudad de San Antonio.
Sí, sí, San Antonio de Padua. El mismo. Ciudad de fabula, os lo aseguro.
Mira que buen sitio para darse un baño el cochino este que llevo encima. |
Y como no podía ser de otra manera hicimos bueno el dicho:
San Antón San Antoniño
santiniño que bebe viño
dame forza no carallo
coma o porco no fuciño…
Y paramos a tomar un vino.
Se nos hizo tarde. Nos hemos tirado a un monte en la localidad de Dolo, cerquita de Padua, para hacer mañana el asalto a Venecia.
Pero eso será otro día… chao, chaito.